¡Por fin llegó agosto! mes por excelencia de vacaciones, sol y playa. Seguro que muchos de vosotros estáis deseando tostar vuestra piel bajo el sol para lucir moreno cuando volváis a la oficina y para ello, no debemos limitarnos al cuidado por fuera, si no que debemos cuidarnos por dentro. Hoy os proponemos algunos alimentos para lograrlo.
La piel se renueva de una forma constante. Su ritmo de crecimiento requiere el aporte de nutrientes esenciales provenientes de una dieta equilibrada. El nutriente necesario para dar color a la piel es el conocido como betacaroteno. Este componente se transforma en Vitamina A por el organismo, que lo asimila en el intestino delgado y se acumula en el hígado en forma de retinol que tendrá la función de dar color a nuestra piel y servir de protección frente a la acción de los rayos ultravioleta. Es un potente antioxidante celular, lo cual nos aporta protección frente a la aparición del temido melanoma.
La vitamina C es un potente antioxidante y además estimula la formación de colágeno en la piel, otorgando una mayor elasticidad y mayor resistencia a nuestra piel. Podemos encontrar vitamina C en muchas frutas, principalmente en todos los cítricos y en otras frutas como el kiwi, la papaya o las fresas.
La vitamina E también es otro gran antioxidante pero que además ayuda a la regeneración de la piel gracias a sus propiedades cicatrizantes. Lo encontraremos en la soja, el aguacate o en el germen de trigo.
Alimentos ricos en Manganeso: El Manganeso es un mineral que se encarga de la absorción de los rayos UVA, actuando como filtro y bloqueador de los radicales libres y al mismo tiempo ayuda también a la pigmentación de la piel.
Ya sabéis, moreno sí, pero con ayuda de una buena alimentación, mejor.