Llevar a cabo una alimentación «Zero Waste» o «Residuo Cero» empieza a ser una opción a considerar.
El cambio climático es una realidad cuyas consecuencias son cada vez más notables; de hecho, algunas ciudades europeas ya han declarado el estado de emergencia climática.
El movimiento “Zero Waste” va ganando adeptos cada día. La razón es la creciente concienciación acerca de la importancia de modificar nuestras acciones para cuidar del medio ambiente.
¿Se puede aplicar la filosofía zero waste a la alimentación? ¿En qué consiste? Si sientes inquietud por este tema, no dejes de leer lo que te explicamos a continuación.
¿Qué es el movimiento “Zero Waste”?
El movimiento “Zero Waste” consiste en llevar a cabo una serie de acciones cuyo fin es reducir al máximo la cantidad de residuos que generamos en nuestro día a día.
Estas acciones pasan por aplicar la estrategia de las «Tres erres del reciclaje»: reciclar, reutilizar (envases, compras de segunda mano, etc.) y reducir nuestro consumo, entre otros.
Además, este movimiento propone hacer uso de materiales que no incrementen los residuos que liberamos al medio ambiente, como los plásticos.
El empleo de bolsas de tela, envases de cartón o vidrio o el rechazo (en la medida de lo posible) de alimentos envasados son algunas de sus premisas.
¿Cómo aplicar el concepto “Residuo Cero” en la alimentación?
Las propuestas del movimiento “Residuo Cero” no solo pueden aplicarse a nuestras acciones cotidianas, sino que también pueden ponerse en práctica en nuestra alimentación.
El objetivo es reducir el máximo los alimentos que se desechan, por lo que la planificación es un aspecto fundamental.
Del mismo modo, al rechazar el uso de alimentos envasados, la compra a granel y de productos locales se convierte en una de las bases del movimiento.
Para aprovechar todo lo posible los alimentos que consumimos, la mejor forma es organizar una planificación semanal.
El momento idóneo es el fin de semana, cuando disponemos de más tiempo. Estas son algunas ideas que pueden resultarte útiles:
- Haz una lista de todos los productos que necesites antes de hacer la compra. Así evitarás comprar cosas que no necesites.
- Busca mercados locales donde poder comprar productos a granel, de proximidad y de temporada.
- Invierte una tarde en preparar algunas comidas o bases de platos para toda la semana. Esto te ayudará a evitar improvisaciones y a preparar más comida de la que luego vas a consumir.
- “Recicla” la comida. Si te ha sobrado comida, congélala poniendo la fecha de congelación. En ocasiones no caemos en la cuenta de lo sencilla que resulta esta acción y cómo puede solucionarnos más de una comida.
Principales beneficios de llevar una alimentación “zero waste”
Además de ayudar al medio ambiente, aplicar el concepto “zero waste” a tu alimentación también va a aportarte diversos beneficios:
- Si tienes unos horarios muy desorganizados, esta acción puede ayudarte a establecer unas pautas fijas en tu alimentación.
- Lograrás alimentarte de una manera más saludable.
- Tendrás el control sobre lo que comes, evitando las improvisaciones.
- Reeducarás tus hábitos, adquiriendo unos más saludables.
¿Estás interesado/a en aplicar el “zero waste” a tu forma de alimentarte y no sabes cómo?
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