El día 7 de abril se celebra el Día Mundial de la Salud, así que es la ocasión perfecta para revisar nuestros hábitos o estilo de vida y cambiar al menos 1 o 2 con el objetivo de mejorar nuestra calidad de vida.
Es sorprendente lo que se puede lograr con pequeños cambios en nuestro día a día para ganar en salud. Sea cual sea nuestro punto de partida, lo principal es dar el primer paso y tomar la decisión de cambiar. Si nos ponemos un motivo, será más fácil cumplir con el propósito. Por ejemplo, «dejar de fumar para estar más en forma para jugar con mis hijos» o «beber más agua para evitar cistitis». En este post te damos algunas ideas para que revises tus rutinas y aprendas a ganar en salud.
La importancia de la actividad física
El ejercicio diario es parte esencial de un estilo de vida saludable. No se trata únicamente de una cuestión estética; la OMS aconseja un mínimo de 30 minutos diarios de ejercicio físico moderado para poder ayudar a prevenir el sobrepeso y la obesidad, la hipertensión o enfermedades cardiovasculares. Si sacar tiempo de tu día a día para realizar alguna actividad física es complicado, aprovecha y adapta alguna de tus rutinas: ve a la compra andando, baja y sube las escaleras en lugar de coger el ascensor, aparca el coche y camina más, etc. También puedes hacerlo en compañía; proponle a tus amigos que, en lugar de reuniros para tomar el clásico picoteo, ahora que viene el buen tiempo, organizad un paseo o incluso alguna excursión. De esta forma, ni te darás cuenta que haces ejercicio y lo practicarás en buena compañía.
Alimentación saludable: la base de una vida sana
Una dieta completa y equilibrada contribuye a la prevención de las llamadas por la OMS «enfermedades no transmisibles», como pueden ser la diabetes, cardiopatías o accidentes cerebrovasculares.
Si tu ingesta diaria no incluye frutas, verduras, cereales y hortalizas y a la vez, no pones freno para limitar el consumo de grasas, azúcares y carnes rojas, debes revisar tu dieta con urgencia. Es probable que ya sepas la teoría, ¿verdad? La dificultad está en aplicar este y otros consejos en nuestra vida diaria, donde la prisas, la pereza y esa sensación de estar perdiendo el tiempo si planificamos en detalle nuestras comidas pueden hacernos caer en buscar soluciones rápidas y poco saludables. Invertir un rato del fin de semana en planificar y cocinar las comidas del resto de días puede ser más útil de lo que crees: optimizarás el tiempo del resto de la semana, irás a comprar únicamente lo que necesitas, diversificarás tu dieta, haciéndola más variada y puedes hacer partícipes de esta planificación al resto de miembros de la familia, principalmente a los más pequeños. Así, ellos se concienciarán acerca de la importancia de una alimentación variada y natural, donde los alimentos procesados no tienen protagonismo.
Duerme un poco más, ¡descansa cuerpo y mente!
Dormir el número de horas necesarias es importante para mantener el cuerpo descansado y contar con las energías necesarias para afrontar el día. Las consecuencias del insomnio o dormir menos horas de las que se necesitan van desde tener un humor o estado de ánimo aleatorio e impredecible, retraso en la reacción de estímulos a un aumento de la presión arterial, dolor muscular o visión borrosa. Si bien puede ser común padecer insomnio en momentos puntuales de nuestra vida (por nervios, ansiedad o preocupaciones), si la situación se alarga en el tiempo es aconsejable consultar nuestra situación con un profesional. ¿Duermes 8 horas diarias? Ponte el objetivo de meterte en la cama y apagar la luz treinta minutos antes de lo habitual, por algo se empieza, ¡propóntelo!
Tiempo de ocio, tiempo para ti
La práctica de actividades como la lectura, la pintura o la práctica de cualquier hobby no relacionado con el trabajo en general las aficiones que más te gusten, desestresa tu cerebro y te ayuda a evitar enfermedades mentales. Además, realizar ejercicios relajantes contribuye a eliminar el estrés diario y ayuda a equilibrar nuestra mente y nuestro cuerpo
Salud sexual para una mejor salud general
La sexualidad humana no tiene una función puramente biológica, sino que tiene una dimensión psicológica, social y física. El sexo hace que nos sintamos mejor, mejoremos nuestro estado anímico y nuestra autoestima. Además, es cardioprotector y activa las hormonas responsables de la felicidad. Por ello, no lo relegues a un papel secundario en tu vida. Vive tu sexualidad de forma plena y, ante cualquier problema, consulta con un médico especialista en Medicina Sexual. No lo ignores ni le restes importancia.
Si quieres adquirir unos hábitos saludables y quieres modificar tu estilo de vida pero no sabes por dónde empezar, solicita aquí una visita informativa gratuita y te asesoraremos acerca de las opciones que tenemos para ayudarte.