Para algunos es un día más “del Corte Inglés”, otra fecha en el calendario para que las campañas publicitarias nos inciten al consumismo desaforado. Pero otras personas, entre las que quizás te encuentras tú, realmente lo viven como un día señalado para exaltar el amor, la amistad y el cariño junto con aquellas personas a las que quieren y desean transmitírselo. Sea o no tu caso, ya está aquí el día más romántico y dulce del año, San Valentín y en Salud10 queremos proponeros algunos consejos saludables para que este día tan dulce, no se convierta en el día más «empalagoso».
1- No regales dulces, chocolates, bombones…
Sabemos que los bombones son el regalo más típico en San Valentín, pero si tú o tu pareja intentáis cuidar vuestra alimentación, no regales los típicos dulces. ¡Hay cosas más originales! Si sois choco-adictos y os queréis pegar el gusto, elige bombones de chocolate negro con un 70% de cacao y con menos calorías. Si quieres regalar algo comestible, en algunas fruterías te preparan cestas de frutas exóticas, ¡un regalo la mar de original, sano y sabroso!
2- Prepara una cena romántica y sana
Preparar una cena romántica, no supone necesariamente comer en exceso o alimentos con muchas calorías. Planea con antelación el menú y elige platos más saludables, por ejemplo, pescado blanco acompañado de verduras y una copa de vino tinto (aconsejable para la salud cardiovascular y con menos calorías que otras bebidas alcohólicas). De postre, os proponemos una fondue de fresas con chocolate negro, que además de estar delicioso dicen que es afrodisíaco.
Si finalmente decides cenar fuera de casa, opta por un restaurante que te ofrezca un menú saludable, por ejemplo vegetariano o sushi.
3- Vuelve a casa dando un paseo al aire libre
Si el tiempo lo permite, la mejor opción para quemar las calorías que habéis consumido durante la cena es con un paseo romántico. Con una caminata a ritmo medio se pueden llegar a consumir hasta 300 calorías.
4- Disfruta de un baile en pareja
Has terminado de cenar, pero todavía no tienes ganas de ir a casa ¡la noche es joven! y que mejor que salir a bailar, que además de divertido gasta muchas calorías. Un ritmo latino como la salsa o el merengue se pueden llegar a gastar unas 400 calorías, ideal para poner en práctica el día de San Valentín. El baile también puede funcionar como regalo, seguro que en tu barrio hay alguna academia en la que puedas preguntar si realizan bonos de regalo para un mini curso de baile en pareja.
5- Y, por supuesto ¡muchos besos!
La mejor forma de quemar calorías es regalando y recibiendo muchos besos. Sí, habéis leído bien. Con un beso se suelen quemar 17 calorías y hace que se ejerciten 30 músculos faciales, pero con un beso apasionado, de esos que hacen historia, se pueden llegar a quemar hasta 27 calorías. Además, si normalmente el corazón produce entre 60 y 80 latidos por minuto, con un beso nuestro corazón se acelera a 150 latidos por minuto.
Quienes besan continuamente viven más años y sufren menos enfermedades, ya que al dar y recibir besos se movilizan secreciones hormonales que funcionan como analgésicos y fortalecen nuestro organismo, así que reduces las posibilidades de enfermar. Además, si tienes el colesterol alto, se ha comprobado que un beso actúa sobre nuestro organismo disminuyendo los niveles de estrés y de tensiones, dos de los elementos responsables del colesterol alto y los problemas cardiovasculares.
Mientras más beses, estarás fortaleciendo los sistemas de protección de tu cuerpo y liberando endorfinas en el torrente sanguíneo, que dan la sensación de felicidad y placer.
¡Feliz San Valentín!