En estos días de intenso calor, cuesta más empezar el día con la energía necesaria para afrontar los retos de la jornada. Además, debido a que (la mayoría de nosotros) acumulamos horas de trabajo en una misma postura, de pie o sentados, es inevitable que el cuerpo se agarrote y adquiera malas posturas. ¿Qué hacer ante este «aletargamiento» generalizado? ¿Qué hacer para que salir de la cama no suponga un esfuerzo titánico?
¡Se acabó! hoy os proponemos 3 sencillos pasos para que el despertar sea más agradable y comencéis el día con mejor pie. De vosotros depende incorporarlos a vuestra rutina matutina.
1º Programar nuestro despertador unos minutos antes: aunque os parezca una locura, lo agradeceréis. Son minutos para dedicarnos a nosotros, a lograr un mayor bienestar.
2º Estiramientos ¡sin levantarse de la cama! Algo que tenemos que aprender de nuestras mascotas (por ejemplo los gatos) es estirar nuestro cuerpo al despertarnos. No es necesario dedicar mucho tiempo, apenas unos minutos e incluso desde la cama, pero siempre con suavidad, pues demasiada intensidad puede provocarnos un tirón. Probemos con uno muy fácil: Piernas estiradas y movemos puntas de los pies hacia delante y luego hacia las rodillas. Otro: rotar muñecas y tobillos lentamente, primero hacia un lado y luego al otro, haciendo pequeños círculos en el aire. Por último: estirar brazos y piernas por completo (¡como si estuvierais intentando crecer!). Conseguiréis desentumecer músculos y articulaciones y a la larga, una mayor flexibilidad.
3º Una vez que hemos conseguido dar el salto de la cama, toca un buen desayuno. Desterremos la fórmula: un café y salir corriendo. El desayuno es una de las comidas más importantes, de las 5 que debes realizar a lo largo del día y se convierte en aliado para afrontar el día con el depósito lleno de glucosa, nuestro combustible energético.
A un desayuno ideal debemos darle la importancia que se merece y dedicarle no menos de 15 minutos para disfrutar de la comida, ya que influye de manera directa en nuestra actividad intelectual y el estado de ánimo. Te proponemos una combinación saludable: un lácteo, que nos proporcionará proteínas y calcio, cereales, que añaden a nuestra dieta hidratos de carbono y fibra, la energía que el cuerpo necesita y, por supuesto, fruta (pieza o zumo / licuado).
Si os apetece más información, podéis consultar el siguiente link: Desayuno Equilibrado
Está en vuestra mano: ¡comenzad el día con una sonrisa!